Las alfombras quedan genial, aíslan del frío en invierno y dan calidez al hogar, pero… es cierto que es complicado limpiarlas. Vamos a darte unas cuantas claves para tener tus alfombras perfectas todo el año.
Aspirar regularmente
Lo ideal para prevenir la suciedad es evitarla. Para ello, lo ideal es aspirarla con regularidad, por lo menos una vez a la semana. Esto eliminará la mayoría de la suciedad, el polvo y los ácaros del polvo que se acumulan en las alfombras. Asegúrate de aspirar en ambas direcciones para levantar la suciedad de ambos lados del tejido y asegúrate de incidir más en las partes de la alfombra de más uso (por ejemplo, en la parte en la que más se suelen poner los pies).
Utilizar bicarbonato de sodio
Para evitar malos olores, una magnífica solución es utilizar bicarbonato de sodio. Se trata de una solución simple y económica cuando la alfombra empieza a absorber olores. Aplícalo espolvoreando el bicarbonato de sodio sobre la alfombra al natural, sin mezclarlo con agua ni ningún otro producto; y dejándolo actuar durante al menos 15 minutos antes de aspirarlo. Esto dejará en la alfombra un aroma fresco y limpio.
Utilizar productos específicos para manchas
Si tienes manchas en la alfombra, es mejor utilizar productos específicos para ellas aunque haya remedios caseros para las manchas. Pero la realidad es que existen productos concretos para manchas de mascotas, vino, café, etc., ya que hay manchas especialmente complicadas de quitar.
En ese caso, sigue las instrucciones del producto y usa para enjuagarlo una toalla de papel o una esponja para aplicarlo en la mancha. Asegúrate retirar bien todo el producto de la zona tratada y de secarla completamente.
Limpieza profunda
Para una limpieza profunda de la alfombra, puedes alquilar una máquina de limpieza de alfombras o contratar a un profesional para que lo haga por ti. Las máquinas de limpieza de alfombras se pueden alquilar en tiendas de suministros para el hogar o de mejoras para el hogar. Sigue las instrucciones del fabricante y utiliza un detergente específico para la limpieza de alfombras. Una vez que hayas terminado, asegúrate de que la alfombra se seque completamente antes de caminar sobre ella.
Prevenir la acumulación de suciedad
Como hemos dicho al recomendar pasar la aspiradora, lo ideal es para prevenir la acumulación de suciedad en tus alfombras es utilizar felpudos en las puertas principales para limpiar bien los pies y pedir a los invitados que se quiten los zapatos antes de entrar en la casa.
Además, es recomendable evitar comer o beber sobre la alfombra, y si se mancha, asegúrate de limpiarla inmediatamente, ya que es mucho más fácil limpiarla antes de que se seque.
¿Es buena idea lavar una alfombra en la lavadora?
Depende del tipo de alfombra que tengas y de la capacidad de tu lavadora. No es recomendable lavar una alfombra en la lavadora si es grande y voluminosa, ya que podría dañar la máquina o la propia alfombra.
Si la alfombra es pequeña y resistente, como una de baño o una de cocina, puedes intentar lavarla en la lavadora siguiendo las instrucciones de cuidado del fabricante en la etiqueta de la alfombra. Sin embargo, si la alfombra es de materiales delicados, como lana o seda, es mejor lavarla a mano o llevarla a una tintorería especializada para evitar daños.
En cualquier caso, si vas a lavar la alfombra en la lavadora, es recomendable aspirarla o sacudirla antes para eliminar la suciedad y los restos de polvo y escombros.
¡Listo! Siguiendo estos consejos, podrás mantener tus alfombras limpias e higiénicas con facilidad. Además, una alfombra limpia no solo es agradable a la vista, sino que también es beneficiosa para la salud, ya que reduce la cantidad de ácaros del polvo y otros alérgenos en el aire. Por supuesto, estos consejos también se aplican a las moquetas.
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